EL BESO. Escultura de Auguste Rodin. Mármol. 1888-1898
Debe tronar la luz
en sus ámbitos dolientes
Debe por mano y fuerza noble
estallar en espasmos, salpicándome los plexos,
la transparencia húmeda, el rocío de las dalias.
Debo presentir que mozarteará la orquesta a pleno
aunque duerman todavía las cuerdas y los bronces.
Debe despertarme el agua
en las sábanas dormidas, en las manos llanas,
en la descalza cercanía de los tréboles.
Tiene que doler para entibiar
Debo creer para temblar.
Y ser intenso el mundo
su gente, los escasos días
para que se devore octubre
la nada
de donde vengo
y a donde volveré.
Entradas
ah los escasos días para escribir versos como estos!! un gusto visitarlo amigo. saludos.
ResponderEliminarintensos versos Raúl....un gusto leerte!! siempre.Abrazos.
ResponderEliminarGaby
Intensidad, vibración en el poema, y un saludo al estilo de los antiguos caballeros que equilibra la sensación, y que con una leve inclinación de mi cabeza te retribuyo, querido amigo, un lujo contar con tu amistad y tu poesía,,,
ResponderEliminarConmovedor, realmente.
ResponderEliminarEs un placer leer textos como éste.
Non tornare mai indietro neanche per prendere la rincorsa... aprendido lejos de acà. No se vuelve nunca hacia atràs ni siquiera para tomar carrera.
ResponderEliminar"tiene que doler para entibiar"...serà porque el amor y el dolor van juntos?
Tus palabras, como siempre, invitan a la reflexiòn, gracias poeta.
Claudia Sanabria